En México, como en muchas partes del mundo existe una tendencia a comenzar a fumar tabaco cada vez a edades más tempranas tanto en mujeres como varones, lo cual implica la urgente necesidad de establecer acciones preventivas destinadas a la población vulnerable.
La campaña para disminuir el consumo de tabaco se ha considerado un gran éxito en el sector de salud pública. A través de este esfuerzo la población ha sido más consiente de los daños ocasionados por fumar y masticar tabaco tales como cáncer, enfermedades del corazón, embolias, enfermedades pulmonares; las cuales incluyen enfisema pulmonar y bronquitis crónica.
Cuando los e-cigarillos llegaron al mercado, inicialmente parecían ofrecer muchos beneficios para dejar de fumar. Sin humo ni olor perceptible, no eran ofensivos y podrían usarse en más lugares y algunos individuos que han sido fumadores de cigarrillos durante años han hecho el cambio a vaping en un intento de dejar de fumar cigarrillos.
¿Qué es vaping?
Vaping se hace usando un vaporizador, a veces también conocida como una pluma vape o e-cigarrillo. Vapes calientan una solución o jugo y lo convierten en un aerosol que está destinado a ser inhalado. La solución líquida se conoce por muchos nombres, tales como e-líquido, e-jugo, jugo de Vape, o líquido vape. Existen numerosas marcas de vaporizadores, algunos de los cuales se utilizan para vape líquidos con sabor básicos y algunos de los cuales se utilizan para vape nicotina que contiene líquido o THC.
Los e-cigarrillos fueron promocionados como menos tóxicos que otros productos de tabaco, y, por lo tanto, más seguros. Además, estos dispositivos ofrecen una variedad de sabores que enmascaraban la nicotina en un paquete tecnológico, consolidando su atractivo para la población más joven. En relación con otros productos de suministro de tabaco, estos dispositivos son ciertamente más seguros. Sin embargo, no son inofensivos y se desconocen las consecuencias a largo plazo.
El objetivo de salud pública sería que los fumadores actuales se cambien al vapeo para reducir su exposición a enfermedades relacionadas con el tabaco. En cambio, la mayoría de los adultos usa cigarrillos electrónicos mientras continúa fumando. lo que es peor, las personas que no fuman comienzan con el vapeo, lo que aumenta considerablemente sus riesgos para la salud.
Considerando la confusión alrededor de los e-cigarrillos, ¿Cómo los practicantes de salud bucal deben aconsejar a los pacientes?
¿Qué tan dañinos son estos aerosoles para la salud oral?
Los riesgos para la salud bucal de los cigarrillos electrónicos se deben no solo a la nicotina, sino también a los componentes del vapor. Más de 60 componentes químicos han sido identificados en este líquido, y aun más han sido identificados en el aerosol incluyendo metales pesados.
Estos químicos que están presentes pueden estar causando un conjunto completamente nuevo de problemas de los que no teníamos conocimiento, y que no se harán evidentes durante los próximos 5 o 10 años.
Aunque no se dispone de resultados a largo plazo, la investigación sobre los efectos en la salud bucal está señalando áreas de preocupación. una encuesta de publicaciones incluye estos hallazgos:
- El vapor de los cigarrillos electrónicos conduce a la muerte celular en el tejido de las encías después de solo dos exposiciones.
- El uso de productos electrónicos de nicotina se asocia con un mayor riesgo de desarrollar enfermedad periodontal (incluso después de tener en cuenta el uso de otros productos de tabaco)
- El uso diario de cigarrillos electrónicos se asoció de forma independiente con un 78% más de probabilidades de mala salud bucal.
- Los aerosoles de cigarrillos electrónicos tienen propiedades similares a las de los caramelos gelatinosos con alto contenido de sacarosa y las bebidas ácidas: los datos sugieren que esto puede aumentar los riesgos de potencial de caries.
Claramente, el odontólogo y otros profesionales de la salud bucal estamos en una posición única para disminuir el daño a largo plazo de esta última preocupación de salud pública con acceso a recursos, información y mediante las visitas de control dos veces al año de nuestros pacientes. La mejor práctica es ofrecer asesoramiento, asistencia y recursos.
Si eres uno de estos pacientes no dudes en acudir a tus revisiones y limpiezas de control cada 6 meses. ¡Prevenir, es la mejor medicina y está en tus manos!